miércoles, 7 de mayo de 2014

LUCRO CESANTE

El término lucro cesante se corresponde con la pérdida de unas ganancias potenciales que se podrían haber obtenido en el caso de que no se hubieran producido determinadas circunstancias contrarias a los intereses de un particular o una empresa. En tal situación, a la diferencia entre lo que se pudiera haber obtenido y lo que realmente se ha obtenido, se le denomina lucro cesante. A veces se confunde este concepto con el de coste de oportunidad. No obstante, hay matices que los diferencian, ya que el coste de oportunidad se produce por el hecho de no hacer algo que podríamos hacer, es decir, somos sujetos activos, y renunciamos a la “oportunidad” de obtener algo, en función del riesgo que nos supone. Sin embargo, en el lucro cesante, somos actores pasivos, ya que es el entorno el que provoca que no ganemos algo que podríamos haber ganado si no se hubieran producido unas circunstancias no esperadas. El lucro cesante se puede producir en el momento en el que el hecho se manifiesta, o bien tener consecuencias futuras que hacen que se sufra ese lucro cesante de manera permanente. Por ejemplo, si se produce un incendio en nuestras naves industriales, tendremos un perjuicio en este momento porque perdemos las mercancías almacenadas y dejamos de ganar la plusvalía que hubiéramos obtenido vendiéndolas (normalmente estaríamos asegurados a precio de coste). Pero además, si las naves están un año sin funcionar, dejaremos de percibir los beneficios que habríamos obtenido si hubiéramos podido seguir produciendo durante esos doce meses.

No hay comentarios:

Publicar un comentario